Reformas energéticas: un paso hacia el derecho a la energía eléctrica

CDMX a 19 de octubre de 2024. En una jornada histórica para el Congreso de la Ciudad de México, se aprobó la minuta para reformar varios artículos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, marcando un hito en el ámbito energético. La diputada Martha Ávila (MORENA), presidenta de la Mesa Directiva, destacó la relevancia de este decreto, que busca fortalecer la regulación estatal del sistema eléctrico y reconocer el derecho humano a la energía eléctrica.

“Hacemos votos para que la reforma contribuya a los avances en materia del reconocimiento del derecho humano a la energía eléctrica de las personas y que sea por el bien de la nación,” expresó Ávila, reflejando la aspiración de un sistema más justo e inclusivo.

Sin embargo, no todos los legisladores comparten esta visión. La diputada Lizzette Salgado Viramontes (PAN) criticó la medida, argumentando que limitar la participación del sector privado podría obstaculizar la transición hacia fuentes de energía más eficientes y sostenibles. Por su parte, el diputado Royfid Torres González (MC) enfatizó la necesidad de un sistema eléctrico accesible y limpio, alertando que la reforma podría alejar al país de la soberanía energética.

El debate estuvo marcado por posturas encontradas. La diputada Cecilia Vadillo Obregón (MORENA) defendió la reforma como una lucha contra el modelo neoliberal que prioriza el lucro privado sobre el bienestar social. En contraste, la diputada Claudia Susana Pérez Romero (PAN) cuestionó la viabilidad de la reforma al no alinearse con la Agenda 20-30 y por no abordar las necesidades energéticas reales del país.

En un momento crucial de la discusión, la diputada Valeria Cruz Flores (MORENA) calificó la reforma como un hecho histórico, afirmando que a partir de 2018 se ha comenzado a cumplir con el mandato constitucional de una rectoría estatal más efectiva. Esta nueva legislación tiene como objetivo recuperar el control sobre el desarrollo energético del país y asegurar el acceso a tarifas más justas.

Finalmente, la minuta fue aprobada en votación nominal con 39 votos a favor, 17 en contra y cero abstenciones, evidenciando el compromiso de algunos legisladores con una política energética que ponga en el centro el bienestar del pueblo mexicano y su soberanía.