
En una medida sin precedentes que conjuga innovación tecnológica con protección ciudadana, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ha presentado en el Estado de México una propuesta legislativa para combatir el consumo de bebidas adulteradas en bares y centros nocturnos, con una herramienta clave: la “Pulsera Centinela”.
Este dispositivo tiene la capacidad de detectar sustancias como ketamina y éxtasis líquido, comúnmente utilizadas para drogar a personas sin su consentimiento en prácticas delictivas conocidas como spiking o “canasteo”. La propuesta contempla penas de hasta siete años de prisión a quien se le compruebe la adulteración de bebidas, un delito que lamentablemente se ha vuelto cada vez más frecuente y que conlleva riesgos como agresiones sexuales, robos e incluso secuestros.
El diputado y líder del PVEM en el Congreso del Estado de México, Pepe Couttolenc, enfatizó durante la presentación de la iniciativa que esta problemática afecta a todos, pero especialmente a las mujeres. “Todos tenemos el derecho de divertirnos y salir sin estar preocupados de que alguien nos va a hacer algún tipo de maldad”, sentenció.
Como parte de esta estrategia, se arrancará un proyecto piloto con la donación de 10 mil pulseras que serán distribuidas gratuitamente, principalmente entre mujeres jóvenes en municipios y universidades del Edomex. El objetivo es comprobar su eficacia en campo antes de extender su distribución de forma masiva, con la participación de gobiernos estatales, municipales, bares y antros.
El dispositivo no sólo alerta sobre la presencia de drogas en las bebidas, sino que también está vinculado a una aplicación móvil con la que las usuarias pueden contactar a las autoridades y enviar su ubicación en caso de emergencia, lo cual lo convierte en un instrumento integral de prevención y reacción ante situaciones de riesgo.
Couttolenc señaló que ya fue presentado un punto de acuerdo para exhortar a los 125 ayuntamientos del estado a firmar convenios con asociaciones de bares y antros, y así facilitar la distribución gratuita de la pulsera. La idea es generar corresponsabilidad entre gobierno, establecimientos y ciudadanía.
Aunque aún se encuentra en etapa inicial, esta tecnología ya ha probado su efectividad en países europeos y, en México, en el estado de Chihuahua. La experiencia internacional sugiere que iniciativas similares han logrado disminuir significativamente los casos de bebidas intervenidas con sustancias tóxicas.
El diputado del PVEM también reconoció las acciones del gobierno estatal encabezado por la gobernadora Delfina Gómez, quien ha promovido operativos que resultaron en el cierre de más de 100 establecimientos por vender bebidas adulteradas, una muestra de que el problema es real y requiere soluciones contundentes.
Con este enfoque integral que une legislación, innovación tecnológica y colaboración institucional, el PVEM busca sentar un precedente nacional en materia de seguridad en la vida nocturna, con una política pública que pone al centro la prevención y la protección, especialmente de las mujeres jóvenes.