
Ciudad de México – En un país donde el 43% de las muertes anuales están vinculadas a enfermedades cardiovasculares, una tecnología japonesa revoluciona la cocina mexicana: un dispositivo que potencia el sabor de los alimentos sin necesidad de sal. Este invento, ya probado en hogares y restaurantes, coincide con la estrategia nacional para reducir el consumo de sodio, impulsada por la Secretaría de Salud.
¿En qué consiste? Desarrollado por la empresa Umami Tech, el dispositivo utiliza pulsos eléctricos de baja intensidad para estimular las papilas gustativas, realzando los sabores naturales de los ingredientes. Según un estudio de la Universidad de Kyoto, esta técnica permite percibir hasta un 50% más de salinidad sin añadir sodio. “Es como engañar al cerebro para que disfrute lo saludable”, explicó el Dr. Hiroshi Tanaka, coinventor del proyecto.
Alineación con políticas públicas – La innovación llega en un momento clave. En 2024, México reforzará el Etiquetado Frontal de Alimentos, incluyendo límites más estrictos para productos altos en sodio. Para el Dr. Juan Carlos Reyes, de la Secretaría de Salud, “esta tecnología complementa nuestros esfuerzos contra la hipertensión, que afecta al 31.5% de adultos mexicanos según la ENSANUT 2022”.
Impacto en comunidades vulnerables – En zonas urbanas y rurales con altos índices de enfermedades renales, como Oaxaca y Chiapas, el gobierno evalúa distribuir el dispositivo a través del programa “Salud en Tu Mesa”. María López, comerciante en Tlacolula, compartió: “Antes cocinábamos con mucha sal por costumbre; ahora mis hijos ni notan la diferencia”.
Respaldo internacional y local – La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha catalogado el invento como “herramienta prometedora para América Latina”. En México, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) iniciará pruebas de calidad en octubre, mientras la startup FoodInnovMX negocia su fabricación local para abaratar costos.
Retos por superar – Expertos advierten sobre la necesidad de educación alimentaria paralela. “La tecnología es útil, pero debe ir acompañada de campañas que modifiquen hábitos culturales arraigados”, señaló la nutrióloga Fernanda González, del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición.
Futuro en la agenda política – Legisladores de Morena y PAN discuten incluir el dispositivo en la próxima reforma fiscal como producto de “primera necesidad” con IVA reducido. Mientras, la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA) ofreció financiamiento para capacitación de chefs y amas de casa.
En un México donde la sal es tanto tradición como amenaza, esta fusión de ciencia y política pública podría escribir un nuevo capítulo: uno donde el sabor no esté reñido con la vida.