
¿Quieres cocinar como un chef, pero no sabes ni dónde encontrar un buen queso madurado o un aceite de oliva con denominación de origen? La Ciudad de México tiene rincones donde los ingredientes no solo se venden: se descubren. Son mercados y tiendas gourmet donde los profesionales y los amantes de la cocina encuentran verdaderos tesoros culinarios.
Uno de los más emblemáticos es el Mercado de San Juan, en el Centro Histórico. Aquí no hay pasillos llenos de fruta genérica. Lo que hay son delicias exóticas: carne de cocodrilo, venado, faisán, charcutería francesa, quesos artesanales, setas salvajes, caviar e insectos comestibles. Es el Disney de los chefs.
Pero San Juan no es el único. En la Roma, tiendas como Delirio (de la chef Mónica Patiño) o Catamundi ofrecen productos seleccionados que van desde pan recién horneado hasta vinos naturales, pasando por embutidos artesanales, encurtidos, especias raras y chocolates mexicanos de origen único.
Si lo tuyo es el producto orgánico y local, entonces tu lugar es el Mercado El 100, que aparece cada domingo con su feria itinerante. Allí puedes comprar directamente a productores de quesos de cabra, mieles de agave, mermeladas artesanales, tortillas de maíz criollo y vegetales sin pesticidas. Todo fresco, todo auténtico.
Otro rincón imperdible es La Nicolasa, una tienda de ingredientes mexicanos premium ubicada en la colonia Juárez. Su especialidad son los productos endémicos y poco comunes: sal negra de Zapotitlán, chilhuacle rojo, maíz bolita, piloncillo en roca, entre otros. Es un paraíso para quienes buscan elevar una receta con autenticidad.
Los precios pueden variar, pero contrario a lo que muchos piensan, no todo es carísimo. Puedes encontrar productos únicos por menos de lo que cuesta un menú ejecutivo en cadena comercial. Además, la calidad es muy superior y el impacto económico va directo a productores locales o importadores especializados.
Además, estos espacios ofrecen más que productos: son puntos de encuentro. En ellos hay catas, talleres, demostraciones culinarias y pláticas con chefs. Son espacios vivos que alimentan la comunidad gourmet de la ciudad y fomentan el conocimiento de lo que comemos.
En redes sociales como Instagram, muchas de estas tiendas se han vuelto tendencia gracias a su estética cuidada y a la experiencia que ofrecen. No es solo ir de compras, es explorar, probar y descubrir. Las cuentas como @gourmetcdmx y @saboresdelaciudad están constantemente recomendando nuevos hallazgos.
Así que la próxima vez que quieras cocinar algo especial, evita el supermercado y date una vuelta por alguno de estos rincones. Porque en la Ciudad de México, el sabor también se compra… y se aprende.