Simultáneamente en Querétaro, Hidalgo y Baja California Sur, se llevaron a cabo las “Jornadas de Normas y Acreditación” mediante una colaboración entre la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA).
El cumplimiento de normas y estándares en productos y servicios fue el eje central de esta acción, concebida para beneficiar tanto a la sociedad como al medio ambiente.
Uno de los aspectos subrayados en estos encuentros es el esfuerzo compartido con autoridades, instituciones, empresarios, centros de investigación y colegios de profesionales vinculados al campo de la normalización y la acreditación.
La infraestructura de la calidad, que comprende normalización, estandarización, acreditación, evaluación de la conformidad y metrología, junto con el cumplimiento de las normas existentes, es esencial para el buen funcionamiento de todos los sectores productivos.
Normas de seguridad, etiquetado, calidad y medio ambiente, entre otras, rigen a los productos y servicios destinados a los consumidores finales, razón por la cual existe un sistema que los evalúa y certifica antes de su puesta en el mercado.
Los productos y servicios destinados tanto a la exportación como a la importación deben cumplir con normas específicas, por lo cual existen entidades que los certifican, calibran, prueban e inspeccionan, y estas a su vez son evaluadas y acreditadas por la EMA cuando demuestran competencia técnica.
Durante las Jornadas que se llevaron a cabo en Hidalgo, Baja California Sur y Querétaro, se resaltó el valor de contar con certificaciones tanto en el Programa Nacional de Auditoría Ambiental como en Igualdad Laboral y no discriminación, en alineación con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 5 de la ONU.
Más de 8,300 acreditaciones en diversos sectores y presencia en 16 países respaldan los 26 años de operación de la EMA, que trabajó por un México más competitivo, sustentable y seguro.