CDMX a 4 de septiembre, 2024.- El Partido Revolucionario Institucional (PRI), liderado por Alejandro Moreno, ha anunciado que sus legisladores votarán en contra de la reforma al Poder Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Moreno afirmó que la iniciativa no solo viola los derechos de los trabajadores, sino que también rompe el equilibrio entre los poderes y pone en riesgo la autonomía del Poder Judicial.
En un mensaje publicado en sus redes sociales, Alejandro Moreno, conocido como “Alito”, reiteró la postura del PRI en contra de la reforma judicial. “Los legisladores priistas siempre estaremos en favor de lo que beneficie al pueblo de México”, afirmó Moreno, enfatizando que el partido no ve en la reforma cambios sustanciales que mejoren el sistema judicial del país.
Moreno argumentó que la reforma podría complicar el acceso a la justicia y tener efectos negativos para miles de trabajadores del Poder Judicial de la Federación. En vísperas de la discusión de la iniciativa en la Cámara de Diputados, el líder priista alertó sobre los riesgos importantes que, según él, esta reforma presenta para el futuro de México.
La decisión del PRI de votar en contra de la reforma llega en un momento de alta tensión política y social. Recientemente, trabajadores del Poder Judicial de la Federación bloquearon los accesos a la Cámara de Diputados para impedir que los legisladores sesionaran y discutieran la reforma. Ante esta situación, la mayoría parlamentaria de Morena decidió trasladar las sesiones a una sede alterna para continuar con los trabajos legislativos.
La postura del PRI se suma a la de otros partidos de oposición que también han manifestado su rechazo a la reforma. Los detractores argumentan que la propuesta de AMLO pone en peligro la independencia judicial y podría afectar la imparcialidad en la administración de justicia.
La reforma al Poder Judicial, que incluye propuestas como la elección de jueces y magistrados por voto popular, ha sido motivo de controversia desde su presentación. Para muchos, representa una amenaza a la separación de poderes y a la autonomía del sistema judicial mexicano.
Por su parte, Morena y sus aliados defienden la reforma argumentando que busca democratizar y hacer más transparente el Poder Judicial. Sin embargo, con el PRI y otros partidos de oposición votando en contra, el camino hacia la aprobación de la reforma se perfila lleno de desafíos.
El desenlace de este debate será crucial para el futuro político y judicial de México. La votación final en la Cámara de Diputados y, posteriormente, en el Senado, determinará si la reforma avanza o si la oposición logra detenerla.