
Texcoco, Edomex a 4 de mayo, 2025.- A casi dos décadas del violento operativo policiaco en San Salvador Atenco, la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que su gobierno retomará el Plan de Justicia para Atenco, una iniciativa que busca reparar el daño a las víctimas de la represión ocurrida en mayo de 2006. El anuncio fue hecho durante una ceremonia en Texcoco, donde Sheinbaum reconoció la deuda histórica con las comunidades afectadas y afirmó que México «ya no es el mismo país que era en esos años». El plan contempla reuniones directas con las víctimas, así como medidas de reparación simbólica, social y material.
El operativo de 2006, que dejó un saldo de al menos dos personas muertas, decenas de heridos y múltiples denuncias por tortura, abuso policial y violencia sexual, fue duramente criticado por organismos nacionales e internacionales. En ese entonces, el Estado mexicano fue señalado por el uso excesivo de la fuerza y la impunidad ante las violaciones a los derechos humanos. Muchas de las víctimas aún esperan justicia plena, a pesar de que el caso fue llevado ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Durante su mensaje, Sheinbaum aseguró que este mes se reunirá personalmente con una comisión de familiares y sobrevivientes para revisar los pendientes del plan que fue propuesto inicialmente en 2021 durante el sexenio de López Obrador, pero que no logró concretarse del todo. “Queremos justicia, pero también reconciliación. Queremos reconocer a todos aquellos que perdieron la vida y su lucha”, expresó la mandataria. En ese sentido, el gobierno federal reiteró que la reparación integral incluye desde medidas legales hasta acciones comunitarias de memoria y verdad.
La reactivación de este plan también representa un mensaje político importante: el compromiso del nuevo gobierno con los derechos humanos y con las víctimas del pasado. Colectivos de Atenco han manifestado que están dispuestos a colaborar, pero exigen que las acciones no se queden en actos simbólicos. “Queremos hechos, no discursos”, señaló un integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, una de las organizaciones que han mantenido viva la lucha desde 2006.
El caso de Atenco marcó a una generación y se convirtió en símbolo de resistencia frente a la represión estatal. Ahora, el gobierno de Claudia Sheinbaum busca cerrar ese ciclo con justicia y acciones concretas. Sin embargo, las expectativas son altas, y las víctimas esperan que esta vez no se trate solo de promesas. “Tenemos la oportunidad histórica de hacer lo correcto”, dijo la presidenta. El tiempo y las acciones lo confirmarán.