
El Estadio Azteca se prepara para vivir una noche eléctrica este jueves, cuando el América de André Jardine reciba al Toluca de Antonio Mohamed en la primera parte de una final que promete fuego: por un lado, las Águilas buscan hacer historia con un tetracampeonato; por el otro, los Diablos Rojos intentarán romper una sequía de 15 años sin levantar el trofeo.
Luego de eliminar a Cruz Azul en un partido que ya es leyenda, el equipo capitalino llega con la moral por las nubes. Jardine ha construido un equipo letal que domina ambos lados del campo:
-
Defensa de acero: La menos goleada del torneo, con Luis Malagón bajo los tres palos y una zaga liderada por Igor Lichnovsky.
-
Ataque explosivo: Henry Martín, Alejandro Zendejas y el chileno Víctor Dávila forman un tridente que ha destrozado rivales.
-
Medio creativo: Álvaro Fidalgo y el uruguayo Rodrigo Aguirre tejen el juego con precisión quirúrgica.
Con 3 títulos consecutivos en su vitrina, América no solo pelea por otro cetro: quiere consolidar una dinastía en el fútbol mexicano.
Toluca: el infierno que resurgió
Mohamed ha inyectado carácter a un equipo que fue la mejor ofensiva del torneo, gracias a:
-
Paulinho: El portugués, líder goleador del Clausura, es un depredador en el área.
-
Alexis Vega: El mexicano recuperó su mejor versión, siendo clave en las eliminatorias ante Monterrey y Tigres.
-
Mentalidad matadora: Eliminaron a dos gigantes (Rayados y Felinos) con contundencia.
Toluca carga con el fantasma de 3 finales perdidas desde su último título en 2010. Ahora, con su undécima final, buscan acercarse a Chivas (12 campeonatos) y América (16).
Claves del duelo
-
Batalla de estilos: La solidez defensiva del América contra el torrente ofensivo del Toluca.
-
Henry vs. Paulinho: Dos goleadores en estado de gracia.
-
El factor Azteca: Las Águilas son casi invencibles en casa, pero Toluca ya venció allí en la liguilla 2023.
¿Qué está en juego?
-
Para América: Convertirse en el primer equipo en ganar 4 campeonatos seguidos en la era de torneos cortos.
-
Para Toluca: Romper el maleficio y volver a ser campeón tras 15 años de espera.
El partido de vuelta, el domingo en el Nemezio Díez, podría ser una bomba si Toluca resiste en el Azteca. Pero Jardine sabe que su equipo debe ganar en casa para controlar la serie. Una final para no pestañear.