AMLO acusa al Poder Judicial de proteger mafias y pide reforma para combatir la corrupción

Por Juan Pablo Ojeda

 

En una contundente declaración durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) acusó al Poder Judicial de haberse convertido en «protector de las mafias del poder económico y político». Esta afirmación subraya la creciente tensión en torno a la reforma judicial que el mandatario ha propuesto y que ha generado un notable debate en el país.

López Obrador argumentó que, a pesar de los esfuerzos por limpiar de corrupción al Poder Ejecutivo y al Legislativo, el Poder Judicial sigue siendo un foco de corrupción. «Todo esto ha llevado a que se propone, porque es nuestra facultad, una reforma al Poder Judicial y no se entienda bien por qué genera tanto escándalo. ¿De qué se trata?», expresó. Según el presidente, este poder se ha degradado a tal punto que ahora actúa como un refugio para intereses económicos y políticos corruptos, lo que compromete la justicia y el respeto a la Constitución.

El presidente destacó que la reforma judicial es necesaria para corregir estos problemas estructurales, afirmando que el Poder Judicial se ha convertido en una «moneda de cambio» en las alianzas políticas. López Obrador también hizo hincapié en que esta situación es el resultado de prácticas que vienen desde hace tiempo y que han permitido a la clase política y a los potentados manipular el sistema judicial a su favor.

La reforma propuesta, que fue aprobada en la Cámara de Diputados el pasado 3 de septiembre, recibió la aprobación de las Comisiones del Senado la noche del domingo. Ahora se espera que sea discutida y votada en el Pleno, donde el proyecto está cerca de alcanzar la mayoría calificada necesaria para su aprobación.

Sin embargo, la iniciativa ha suscitado una fuerte oposición. Los trabajadores del Poder Judicial han iniciado un paro que se extiende por casi tres semanas, y se han realizado marchas estudiantiles en contra de la reforma. Además, este lunes los ministros de la Suprema Corte acordaron mantener la suspensión de actividades, en una decisión dividida, alineándose con los trabajadores en protesta.

La polémica en torno a la reforma judicial refleja la profunda crisis de confianza en el sistema judicial mexicano y pone en evidencia las tensiones entre el Ejecutivo y el Poder Judicial.

 

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