
Cuetzalan, Puebla a 24 de junio, 2025.- El periodista independiente Salomón Ordóñez Miranda, mejor conocido como Shalom, fue asesinado la noche del lunes en la localidad de Pahpatapan, municipio de Cuetzalan del Progreso, Puebla. Los primeros reportes indican que un sujeto armado se acercó a él mientras estaba a bordo de su motocicleta y le disparó en al menos dos ocasiones a quemarropa.
El ataque ocurrió en la privada 15 de Mayo. A pesar de que vecinos alertaron a las autoridades, los servicios de emergencia tardaron más de una hora en llegar. Salomón aún fue trasladado con vida, pero lamentablemente falleció mientras recibía atención médica.
La Fiscalía General del Estado de Puebla ya investiga el crimen. Sin embargo, tanto la respuesta tardía de los servicios de auxilio como el silencio inicial de las autoridades municipales han generado indignación en redes sociales y entre colegas del gremio periodístico.
¿Quién era Salomón “Shalom” Ordóñez?
Salomón era conocido por cubrir eventos culturales, festividades indígenas, actividades comunitarias y contenidos turísticos en Cuetzalan y municipios cercanos. Su página de Facebook, Shalom Cuetzalan Producciones, contaba con más de 75 mil seguidores, y se había consolidado como un medio local alternativo que promovía la identidad y riqueza cultural de los pueblos originarios de la Sierra Norte de Puebla.
Aunque no se ha confirmado si el asesinato está directamente relacionado con su labor informativa, la línea de investigación principal apunta a su actividad como periodista independiente.
Armenta condena el crimen… en medio de la polémica
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, fue cuestionado por medios sobre el caso, al tratarse del primer asesinato de un periodista durante su gestión. Aseguró que su administración no promueve la violencia ni confronta con la prensa: “Nosotros protegemos”, dijo.
Sin embargo, sus declaraciones llegan en un contexto tenso por la reciente aprobación de la llamada “Ley Censura”, que tipifica como delito el “ciberasedio” y permite castigar con hasta 3 años de cárcel comentarios u ofensas en redes sociales. Diversas organizaciones y periodistas han advertido que dicha ley podría usarse para reprimir la libertad de expresión.
Exigen justicia y garantías para el periodismo local
Diversas voces han exigido a la Fiscalía una investigación a fondo que contemple su labor como comunicador como móvil del crimen. Colectivos y periodistas independientes también pidieron que se garantice la seguridad de quienes informan en comunidades marginadas y zonas rurales, donde el acceso a medios es limitado y el periodismo comunitario representa una voz esencial.