
En un giro que ha generado controversia, la Corte Suprema de Estados Unidos ha permitido que entre en vigor la prohibición impulsada por el presidente Donald Trump para impedir que personas transgénero sirvan en las fuerzas armadas del país. La decisión, emitida el 6 de mayo de 2025, revoca fallos previos que bloqueaban la medida y permite su implementación mientras continúan los litigios en tribunales inferiores .
El veto, establecido mediante la Orden Ejecutiva 14183 titulada «Prioritizing Military Excellence and Readiness», argumenta que la identidad de género divergente del sexo asignado al nacer «entra en conflicto con el compromiso de un soldado con un estilo de vida honorable, veraz y disciplinado» . Esta política ha sido criticada por organizaciones de derechos civiles y defensores de la comunidad LGBTQIA+, quienes la consideran discriminatoria y perjudicial para la moral y diversidad dentro del ejército.
La medida podría afectar a aproximadamente 15,000 personas transgénero que actualmente sirven en las fuerzas armadas de Estados Unidos . Además, el Departamento de Defensa ha señalado que eliminará el reclutamiento de personas transgénero y procederá a expulsar a quienes ya estén en servicio, salvo que obtengan una exención individual .
El fallo de la Corte Suprema ha sido recibido con preocupación por parte de los tres jueces progresistas del tribunal, quienes votaron en contra de la medida. Organizaciones como Lambda Legal y la Human Rights Campaign han condenado la decisión, afirmando que está basada en prejuicios y no en la preparación militar.
Este desarrollo marca un nuevo retroceso en los derechos de las personas transgénero en Estados Unidos, revirtiendo políticas anteriores que permitían su servicio abierto en el ejército . La comunidad y sus aliados continúan luchando por la igualdad y la inclusión en todas las esferas de la sociedad.