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Después de varios días con temperaturas sofocantes, México se prepara para un giro brusco en las condiciones climáticas. A partir de este jueves, el frente frío número 42 traerá consigo lluvias intensas, granizo, fuertes vientos y un refrescamiento generalizado en el ambiente, principalmente en la mitad centro-oriental del país. Este sistema, impulsado por una masa de aire polar, promete dejar atrás el calor extremo que ha dominado buena parte del territorio nacional.
Este miércoles, el frente frío se mantiene casi estacionario en el noreste del país, provocando apenas algunas lluvias aisladas. Sin embargo, se espera que a partir del jueves retome su desplazamiento hacia el sureste, empujado por un nuevo pulso de aire polar. Durante la tarde y noche del jueves, el sistema cruzará desde Coahuila hacia Nuevo León y Tamaulipas, generando lluvias fuertes y vientos con rachas intensas. Para la mañana del viernes, alcanzará el norte de Veracruz y la región Huasteca, y por la tarde-noche estará llegando al sur de Veracruz, en los límites con Tabasco.
La llegada de este frente frío, sumada a una vaguada que se desarrollará sobre la Sierra Madre Oriental, generará tormentas desde el Altiplano hasta el Valle de México. El fenómeno se intensificará durante el viernes, cuando la masa polar avance hacia el centro del país, y continuará el sábado cruzando la península de Yucatán, acompañado de tormentas severas.
El pronóstico prevé acumulaciones importantes de lluvia. Entre jueves y domingo, las precipitaciones más intensas podrían superar los 150 o incluso 200 milímetros en regiones del oriente y sureste del país, especialmente en estados como Veracruz, Tabasco, Chiapas y Oaxaca. También se esperan granizadas, especialmente en zonas del noreste y centro, producto del contraste térmico entre el calor acumulado y el aire frío entrante. Se alerta sobre la posibilidad de eventos severos con inundaciones urbanas e incluso nevadas en zonas altas, como los volcanes.
El descenso térmico será evidente desde el viernes. En regiones de montaña, las máximas podrían oscilar entre los 5 y 15 °C, mientras que en el Altiplano central, incluyendo el Valle de México, los termómetros rondarán entre 15 y 25 °C. Para el sábado, el clima templado se afianzará en el norte, noreste, oriente y centro del país, extendiéndose también hacia la península de Yucatán, donde se prevé un descenso de temperaturas coincidiendo con las lluvias. El domingo las condiciones se mantendrán frescas, especialmente por las mañanas.
Mientras tanto, en el litoral del Pacífico, el ambiente caluroso persistirá, con temperaturas que podrían superar los 40 °C debido al efecto Föhn y la influencia de un anticiclón en altura. Sin embargo, el avance del frente frío terminará mitigando también estas condiciones, aunque en menor medida.
En resumen, el frente frío 42 traerá un alivio temporal a las temperaturas extremas que han golpeado al país, aunque con un costo: lluvias intensas, posibles inundaciones, granizadas y un panorama climático completamente distinto al registrado en días recientes. Las autoridades recomiendan mantenerse informados ante los posibles riesgos meteorológicos durante este periodo de transición climática.