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Por Juan Pablo Ojeda
Durante el pasado fin de semana, Lilly Téllez, senadora del Partido Acción Nacional (PAN), ha encendido las redes sociales con acusaciones contra el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Según Téllez, tanto el partido como el mandatario federal están intentando arrebatarle su curul en el Senado, un cargo que ella considera le pertenece por derecho.
Téllez, quien comenzó su carrera política con Morena antes de unirse al PAN, ha sido una crítica feroz de la llamada Cuarta Transformación. Su cambio de partido no ha sido bien recibido por algunos sectores del morenismo, y parece que las tensiones han escalado. La senadora ha afirmado que el reciente acuerdo del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre las diputaciones y senadurías por la vía plurinominal de Morena es parte de una estrategia para sacarla del Senado.
A través de su cuenta en X, Téllez denunció que Morena está tratando de bloquear su reelección porque ha sido vocal en su oposición a la 4T. “Ante el INE, Morena quiere impedir que sea Senadora porque expresé opiniones contra la 4T, en el programa de radio de Ciro Gómez Leyva. Estoy iniciando mi defensa legal contra estos imitadores de Maduro que aplastan a opositores”, escribió el domingo.
La senadora no se detuvo ahí. Este lunes 26 de agosto, amplió sus acusaciones, incluyendo a Claudia Sheinbaum, la presidenta electa, en sus señalamientos. Téllez sugirió que tanto AMLO como Sheinbaum han influido en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) para que trabaje en su contra. Según ella, la intención es “quitarla del camino” porque, en su opinión, representa una amenaza para la futura presidenta.
“El ‘delito’ por el que AMLO y Sheinbaum me quieren robar la senaduría es este: Denuncié insistentemente la explosión de violencia en Sonora, en el programa de Ciro Gómez Leyva. Morena sigue el ejemplo de Maduro en Venezuela”, afirmó Téllez.
La controversia no tardó en generar una oleada de reacciones en línea. Algunos usuarios de redes sociales expresaron apoyo a Téllez, mientras que otros criticaron sus acusaciones. Comentarios como “Son viles. Comunistas resentidos sociales quieren todo el poder” y “¿Te la quieren robar? No recuerdo cuando la ganaste” reflejan la polarización y el debate intenso que rodea este tema.
En sus declaraciones, Téllez también advirtió que la próxima presidenta tendrá acceso a todos los recursos del Estado, incluidas las Fuerzas Armadas y la mayoría en el Congreso. Según ella, este poder concentra demasiada influencia y suscita inquietud. “La presidenta Sheinbaum tendrá todo el poder del Estado, las Fuerzas Armadas y la mayoría en el Congreso. Pero su inseguridad predomina: ordenó que me arrebaten la senaduría. Le da miedo que tengo la fuerza de la razón y la voz para enfrentarla. Lo advertí: es una comunista”, concluyó.
Mientras la disputa continúa, el debate sobre el papel y las intenciones de los actores políticos en México sigue siendo una cuestión candente. La situación de Lilly Téllez no solo refleja las tensiones internas en el Congreso, sino también el clima político en el que se definen los futuros cargos y políticas en el país.
