Por Juan Pablo Ojeda
El cantante de reguetón Nicky Jam ha decidido retractarse y retirar públicamente su apoyo al expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, en una declaración que ha resonado profundamente en la comunidad latina. Esta decisión se produce después de que el comediante Tony Hinchcliffe se refiriera a Puerto Rico como una «isla flotante de basura» durante un mitin de Trump en Nueva York, lo que llevó a Nicky Jam a romper definitivamente con el exmandatario y reafirmar su orgullo por su herencia puertorriqueña.
La controversia comenzó a mediados de septiembre, cuando Nicky Jam apareció en un evento de la campaña de Trump en Las Vegas, respaldando abiertamente su candidatura para las elecciones de 2024. Este apoyo inicial generó una ola de críticas en la comunidad latina y en la industria musical, lo que llevó al grupo de rock mexicano Maná a eliminar de sus plataformas digitales la canción «De los Pies a la Cabeza», que habían grabado junto al artista en 2016. Maná declaró firmemente que «no trabaja con racistas».
La situación se intensificó a finales de octubre, cuando Hinchcliffe realizó su comentario despectivo sobre Puerto Rico. La indignación en la comunidad puertorriqueña fue inmediata, y Nicky Jam reaccionó a través de un video en sus redes sociales, donde expresó su molestia y se distanció de Trump. «Nunca en mi vida pensé que un mes después iba a venir un comediante a criticar a mi país… renuncio a cualquier apoyo a Donald Trump y me echo de un lado a cualquier situación política. Puerto Rico se respeta», afirmó el reguetonero.
En su declaración, Nicky Jam explicó que inicialmente había respaldado a Trump pensando en el impacto económico de su candidatura. «La razón por la cual yo apoyé a Donald Trump era porque pensé que era lo mejor para la economía de Estados Unidos, donde viven muchos latinos, muchos inmigrantes que están sufriendo», indicó. Sin embargo, tras el comentario ofensivo sobre Puerto Rico, el cantante decidió alejarse de cualquier vinculación con la política estadounidense, afirmando que «la dignidad de su país es primero».
Por su parte, Maná ha manifestado su apoyo a la actual vicepresidenta y candidata demócrata Kamala Harris, participando en un evento a favor de su campaña en Las Vegas. Esto subraya el impacto que tienen las figuras públicas en la política, y refuerza la idea de que el discurso político debe ser inclusivo y respetar la diversidad cultural.
Con su retractación, Nicky Jam se une a otras personalidades del entretenimiento que han manifestado su oposición a Trump. Su decisión de distanciarse del expresidente resuena con fuerza entre quienes creen que la política debe honrar la identidad de los pueblos.
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