
El Real Madrid anunció este martes un cambio simbólico pero cargado de significado: Kylian Mbappé, uno de los fichajes más esperados en la historia reciente del club, dejará de utilizar el dorsal número 9 y portará el mítico número 10 a partir de la próxima temporada. Con esta decisión, el delantero francés asume un rol aún más protagónico en el equipo, tomando el relevo de Luka Modric, leyenda viva del club merengue, quien recientemente firmó con el AC Milan tras una década gloriosa en la capital española.
A través de sus redes sociales, el club blanco compartió una imagen de la camiseta de la temporada 2025-2026 con el nombre de Mbappé y el número 10 estampado. En el sitio web oficial del club, el atacante francés ya aparece registrado con su nuevo dorsal, el mismo que ha vestido con la selección nacional de Francia durante años y que ahora simboliza su liderazgo dentro del equipo más laureado de Europa.
El dorsal 10 no es un número cualquiera en la historia del Real Madrid. Ha sido portado por futbolistas de gran talento y peso histórico como Luís Figo, Clarence Seedorf, Mesut Özil, Michael Laudrup y el legendario Ferenc Puskás. Ahora, con la llegada de Mbappé a esa lista, la afición espera que el jugador aporte su explosividad, visión de juego y capacidad goleadora para seguir escribiendo páginas doradas en la historia del club.
Luka Modric, quien deja vacante el número, se marcha como una de las grandes figuras del Real Madrid. Su palmarés lo dice todo: seis Ligas de Campeones, un Balón de Oro y una influencia silenciosa pero decisiva en los años más exitosos del club en la última década. Su salida al fútbol italiano marca el fin de una era, mientras que la designación de Mbappé con el número 10 apunta al comienzo de otra.
Por otra parte, el Real Madrid también hizo oficial que el defensa Raúl Asencio, canterano del club, se integrará al primer equipo con el dorsal número 17, número que estaba libre tras la marcha de Lucas Vázquez.
Con esta nueva numeración, el club no solo reorganiza su plantilla, sino que lanza un mensaje claro: Kylian Mbappé es, a partir de ahora, el referente indiscutible del proyecto blanco.