
Adidas emitió este lunes una disculpa pública luego de que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuestionara a la marca por comercializar un modelo de sandalia que reproduce un diseño tradicional indígena sin otorgar crédito a la comunidad de origen. El calzado, llamado “Oaxaca Slip-On”, está inspirado en los huaraches característicos de Villa Hidalgo Yalálag, en Oaxaca, y fue lanzado hace cinco días en colaboración con el diseñador mexicano-estadounidense Willy Chavarría.
En un comunicado, la firma reconoció que el modelo se basó en un diseño “arraigado en la tradición de Villa Hidalgo Yalálag” y expresó: “Ofrecemos una disculpa pública y reafirmamos nuestro compromiso de colaborar con Yalálag en un diálogo respetuoso que honre su legado cultural”.
El incidente ocurre en un contexto de creciente escrutinio hacia las grandes marcas por el uso de elementos culturales sin reconocimiento ni beneficio para sus creadores originales. Apenas días atrás, Prada enfrentó críticas en la India por presentar en su desfile de Milán un calzado similar a las tradicionales babuchas Kolhapuri.
Sheinbaum advirtió que su gobierno está evaluando vías legales para proteger a las comunidades indígenas frente a casos de apropiación cultural, mientras autoridades de Oaxaca también reprocharon a Adidas el uso del diseño sin autorización.
El modelo “Oaxaca Slip-On” combina una suela negra de zapatilla con el trenzado de cuero típico de los huaraches mexicanos. Chavarría, quien diseñó la pieza, declaró el sábado que lamentaba “profundamente que la zapatilla se haya apropiado de este diseño y no se haya desarrollado en colaboración directa y significativa con la comunidad oaxaqueña”.
La controversia ha reabierto el debate sobre los límites entre la inspiración y la explotación cultural, así como sobre la necesidad de establecer mecanismos que garanticen el reconocimiento y la retribución justa a los artesanos que resguardan tradiciones milenarias.