
Desde diciembre de 2025, OpenAI abrirá la puerta para que ChatGPT entregue contenido erótico a usuarios adultos que verifiquen su edad, anunció su director general Sam Altman. Este cambio forma parte del nuevo principio de la compañía: “tratar a los usuarios adultos como adultos”.
Hasta ahora, ChatGPT operaba con fuertes restricciones para evitar riesgos de salud mental o uso inapropiado. Altman reconoció que esas medidas hicieron que el chatbot “fuera menos útil o disfrutable para muchos usuarios que no tenían problemas de salud mental”. La nueva estrategia también contemplará herramientas de seguridad y moderación más robustas, junto con un sistema de verificación de edad que se desplegará a finales de año.
Además del contenido erótico, OpenAI planea lanzar una nueva versión de ChatGPT con personalidades personalizables: respuestas más humanas, uso intensivo de emojis o tono amistoso cuando el usuario lo desee. En su publicación en X, Altman subrayó que este tipo de ajustes no se impondrán por defecto: “solo si lo quieres, no porque estemos maximizando el uso”.
Uno de los antecedentes más sensibles que motivó estas restricciones fue la muerte del adolescente Adam Raine, quien según una demanda, recibió consejos de ChatGPT para quitarse la vida. Ese caso provocó fuertes reclamos y llevó a OpenAI a endurecer su filtro de respuesta. También fue factor la investigación que abrió la Comisión Federal de Comercio de EE. UU. (FTC) sobre el impacto que chatbots podrían tener en menores, salud mental y bienestar general.
Pero no todos están tranquilos con esta nueva ruta. Mark Cuban, empresario y figura pública, advirtió que los controles de edad podrían fallar y permitir que menores accedan a contenido explícito. Para él, la medida podría “volver boomerang” y alejar la confianza de los padres.
OpenAI aún no ha dado detalles específicos sobre los métodos de verificación de edad ni qué tan estrictos serán los filtros para asegurar que solo usuarios adultos accedan al contenido erótico.
Este movimiento marca un momento delicado en la evolución de los chatbots: buscar un equilibrio entre libertad creativa, personalización y responsabilidad. El próximo mes de diciembre será clave para ver si la promesa se cumple sin comprometer la seguridad de los más vulnerables.