
Ciudad de México, 14 de agosto de 2025.-Alrededor de 50 jóvenes usuarios de bicicletas y motos eléctricas tomaron las calles de la capital para protestar contra la iniciativa de reforma que obligaría a emplacar estos vehículos, exigir licencia de conducir y cumplir con otras regulaciones similares a las de motocicletas.
La movilización inició en el Monumento a la Revolución y avanzó hasta el Congreso de la Ciudad de México, donde, entre consignas como “¡No a la Corrupción! ¡No a las Placas!”, los manifestantes retiraron vallas y subieron las escalinatas para mostrar su rechazo.
Entre los asistentes también se encontraban comerciantes que dependen de estos vehículos para repartir mercancías. Rubén Arenzana, uno de los voceros, acusó que la medida no busca mejorar la seguridad vial, sino implementar una “estrategia de recaudación” que afectará la economía de los usuarios.
Aunque al momento de la protesta no había legisladores presentes, más tarde algunos diputados recibieron a los manifestantes y acordaron instalar mesas de trabajo para buscar acuerdos, con un segundo encuentro programado en los próximos días.
La propuesta, presentada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, y que será votada este viernes en un periodo extraordinario, establece que cualquier vehículo eléctrico motorizado que supere los 25 km/h y pese más de 35 kg deberá:
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Contar con licencia de conducir.
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Portar casco y chaleco reflectante.
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Tener placas y tarjeta de circulación.
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Respetar normas de tránsito aplicables a motocicletas.
Además, se prohíbe su circulación por ciclovías y banquetas. Según los legisladores, la intención es ordenar la movilidad, mejorar la seguridad vial y reducir riesgos ante el crecimiento descontrolado de la micromovilidad eléctrica.
Sin embargo, los usuarios consideran que las disposiciones son excesivas y que podrían provocar confusiones jurídicas, además de desalentar el uso de una alternativa de transporte económico y ecológico.
La votación de esta iniciativa marcará un punto clave en el debate sobre el futuro de la micromovilidad en la Ciudad de México, dividiendo posturas entre quienes defienden la seguridad y quienes ven en estas medidas un obstáculo innecesario.